El término elegante para comer heces es coprofagia. Es un hábito desagradable y es bastante común en los perros, especialmente en los cachorros. Comer heces es un hábito desagradable que puede introducir algunos parásitos internos en el cuerpo de tu peludo.
Causas de la coprofagia en perro
Razones médicas y físicas de la coprofagia en perros:
- Parásitos intestinales: los parásitos se alimentan de los nutrientes del perro.
- Insuficiencia pancreática endocrina (EPI): este es un trastorno en el que el páncreas no produce enzimas digestivas; la comida que se ingiere no se descompone ni se absorben los nutrientes (el perro se muere de hambre)
- No alimentar al perro con la cantidad adecuada de comida.
- Dieta de mala calidad falta de nutrientes.
- Gusto: las heces de gato pueden tener buen sabor para un perro.
- Los perros comerán la caca de sus cachorros para limpiar la guarida; este es un comportamiento normal en algunos perros.
- Algunos medicamentos pueden causar perdida de nutrientes u ocasionar más ganas de comer.
Razones de comportamiento para la coprofagia en perros:
- Un perro maltratado que no estaba siendo alimentado, se acostumbró a comer sus propias heces (coprofagia)
- Cachorros de criaderos que fueron descuidados y en condiciones de sobrepoblación, causando problemas de ansiedad.
- El cachorro quiere llamar la atención de los padres de la mascota.
- Aburrimiento (sin actividades ni tiempo de juego)
- Encerrado/aislado por un período prolongado de tiempo.
Diagnóstico de la coprofagia en perros
El veterinario es probable que revise el historial médico del paciente. Hágale saber sus preocupaciones con respecto a que su perro coma heces. Es también muy posible que el veterinario quiera analizar cuál es la dieta actual de su perro y con qué frecuencia lo alimenta. También puede querer saber las actividades diarias del perro y su horario habitual (tiempo de juego, paseos, si está enjaulado o socializado).
Luego, el médico realizará un examen físico, que puede incluir tomar el peso, la temperatura, el pulso y la presión arterial del paciente. Es posible que el veterinario desee realizar análisis de sangre, como un conteo sanguíneo completo (CBC) y un panel de química sérica. El hemograma completo puede ayudar a evaluar el recuento de plaquetas, glóbulos rojos y blancos. El CBC también puede ayudar a determinar si el perro es anémico o tiene una infección bacteriana. Un examen ayudará a determinar la función de los órganos y qué tan bien están funcionando los órganos del cuerpo. El veterinario también puede recomendar un análisis de orina, una prueba de grasa fecal (mide la grasa en la muestra de heces) y un examen fecal (verifica si hay parásitos). Estas pruebas de diagnóstico pueden ayudar a reducir la causa y pueden revelar problemas de salud subyacentes.
Tratamiento de coprofagia en perros
La insuficiencia pancreática endocrina generalmente se trata reemplazando las enzimas digestivas, ya sea adicionando páncreas de res o de cerdo a su dieta. La idea es que se suministre de forma cruda, ya que conserva todas sus propiedades, recuerda que si tu mascota nunca ha comido alimentos crudos es importante adicionar pequeñas cantidades o hacer una transición y no ocasionar molestias digestivas. El paciente también recibirá suplementos dietéticos y vitaminas.
Los parásitos se tratan con un antiparasitario, los juguetes y los comederos de su perro deberán lavarse con agua caliente. El piso debe limpiarse y desinfectarse para ayudar a eliminar los huevos restantes.
Los perros diagnosticados con dietas deficientes deberán recibir alimentos de mejor calidad (Dieta Barf). En caso tal de no recibir alimentos crudos, se recomienda entonces leer la etiqueta de ingredientes; el primer ingrediente debe ser una proteína y preferiblemente de origen animal, no un “subproducto”. También se pueden prescribir suplementos dietéticos y vitaminas. Los pacientes anémicos pueden necesitar vitamina B-12.
Los perros sin condiciones médicas pueden estar comiendo heces debido a razones de comportamiento. El veterinario puede sugerir más tiempo de juego y paseos, y menos tiempo a solas. Los perros que se ejercitan y juegan tienden a estar más contentos. Si su perro persiste en comer heces, debemos buscar un tratamiento alternativo como el cambio de comportamiento.
Suplementos con Enzimas Digestivas
Cuando los perros mayores comen heces, suele ser un signo de una reducción en la eficiencia de las enzimas digestivas debido al envejecimiento. Adicionarle a su perro páncreas o alimentos crudos que en su formulación contengan páncreas, entre otras viseras, ayuda a la producción de enzimas digestivas y por ende ayudarlo a descomponer adecuadamente sus alimentos y absorber todos los nutrientes
Piña o papaya
Ofrecer piña o papaya a tu perro ayuda a prevenir que se coman sus propias heces. La piña o papaya ayuda a romper el hábito porque hace que la caca sea ácida y poco atractiva para tu perro. Los snacks de piña o papaya desincentiva a muchos perros con hábitos de consumo de heces. ¡Pruébalo hoy!